Con más de 43 millones de hectáreas dedicadas al aprovechamiento cinegético, España se consolida como uno de los países con mayor superficie destinada a esta actividad. Así lo refleja el Estudio del impacto económico, social y ambiental de la actividad cinegética, presentado recientemente en Madrid por la Fundación Artemisan, que analiza en profundidad el papel que juega el sector cinegético en el territorio nacional.

Castilla y León, la gran dominadora

Comunidades con más terreno de caza de España.
Comunidades con más terreno de caza de España. © JyS

La comunidad autónoma que lidera esta clasificación es Castilla y León, con nada menos que 8,34 millones de hectáreas cinegéticas. Le sigue muy de cerca Castilla-La Mancha, con 7,09 millones de hectáreas, mientras que Andalucía ocupa el tercer lugar del podio con 6,97 millones. Juntas, estas tres regiones concentran una parte significativa de la superficie cinegética total de España.

Por detrás del podio se sitúa Aragón, con 4,43 millones de hectáreas, seguida por Extremadura, que alcanza los 3,47 millones. Cataluña cuenta con una superficie cinegética de 2,85 millones de hectáreas, ligeramente por delante de Galicia, que suma 2,66 millones. La Comunidad Valenciana dispone de algo más de 1,90 millones de hectáreas, mientras que Navarra alberga 0,97. Asturias le sigue con 0,91 millones de hectáreas, y Murcia con 0,72. Madrid contabiliza 0,57 millones de hectáreas destinadas a la actividad cinegética, el País Vasco 0,55 y La Rioja 0,49. Cantabria aporta 0,46 millones de hectáreas, y en el archipiélago canario se registran 0,38. Finalmente, las Islas Baleares cierran la clasificación con 0,33 millones de hectáreas.

La distribución muestra diferencias muy marcadas entre comunidades, siendo La Rioja, Navarra y Aragón las que, en proporción, más terreno destinan a esta actividad en relación con su extensión total. En La Rioja, el 98 % del territorio cuenta con aprovechamiento cinegético autorizado, seguida de Navarra (94,3 %) y Aragón (92,9 %).

Una red de más de 31.000 cotos

España cuenta con un total de 31.650 cotos, de los cuales más del 86 % son de oferta privada. Dentro de esta categoría, predominan los cotos privados de caza, que abarcan más de 27 millones de hectáreas. En menor medida aparecen los cotos deportivos, municipales e intensivos.

En la oferta pública, destacan los cotos sociales, que representan más de 2,5 millones de hectáreas, y las zonas de caza controlada, con 758.029 ha. También existen terrenos donde la caza está prohibida o restringida, como los refugios de fauna, los vedados o las zonas de seguridad, aunque su peso en el total es residual.

© Fundación Artemisan

Impacto económico y gestión

Además de su extensión, la actividad cinegética genera un notable impacto económico en España: 10.190 millones de euros al PIB nacional, el mantenimiento de 199.000 empleos (de los que 45.642 son directos) y 1.200 millones en retornos fiscales. Cifras que consolidan su papel como motor de desarrollo rural y sostenibilidad.

En cuanto a la gestión de los terrenos, el estudio indica que casi el 70 % de la superficie cinegética está gestionada por sociedades de caza. Le siguen las personas físicas (17,4 %), las sociedades mercantiles (10,1 %) y, en último lugar, la administración pública (2,8 %).

Predominio de la caza menor y mayor

El informe también detalla las modalidades practicadas. La caza mixta (mayor y menor) es la predominante, con el 75,2 % de los cotos, seguida de los dedicados solo a caza menor (17,1 %) y los centrados exclusivamente en caza mayor (7,7 %).

Estos datos reflejan no solo la importancia cuantitativa del terreno cinegético, sino también su diversidad, utilidad y repercusión en la economía y el medio rural.

Sobre el autor