Desde que el Real Madrid hizo oficial la llegada de Xabi Alonso al banquillo blanco, el mundo del fútbol no ha dejado de hablar del que, sin duda, es uno de los entrenadores más prometedores del panorama internacional. Su fichaje ha reavivado también el interés por su trayectoria, no solo como futbolista y técnico, sino en facetas mucho más personales, muchas de ellas completamente desconocidas para el gran público.
Una de esas facetas poco conocidas es la especial relación que el técnico guarda con el mundo rural y la caza, una conexión que se remonta a su infancia gracias a la afición de su padre, el también exfutbolista Periko Alonso. Y es que fue este quien, a finales de los años 70, empezó a visitar con frecuencia la localidad de Ágreda, en la provincia de Soria, atraído por los pasos migratorios de la paloma torcaz, especie por la que sentía auténtica pasión.

Con el tiempo, aquellas escapadas se transformaron en una costumbre familiar. Tanto, que la familia Alonso decidió comprar una vivienda en la villa soriana para hacer más cómodas sus estancias. Ágreda, conocida como la villa de las tres culturas por su legado cristiano, musulmán y judío, fue el escenario de innumerables veranos para Xabi y su hermano Mikel, que pasaron allí parte de su infancia y adolescencia.
Una infancia marcada por la vida rural
Durante años, los veranos en Ágreda fueron sinónimo de libertad, juegos y travesuras. Los dos hermanos, que más tarde desarrollarían también una exitosa carrera futbolística, encontraron en este rincón de Soria un lugar en el que desconectar y vivir experiencias lejos del ruido mediático que inevitablemente les rodearía con el tiempo.

Aunque, con los años, las visitas fueron siendo menos frecuentes debido a los compromisos profesionales, la familia siempre ha conservado un fuerte vínculo emocional con el pueblo. Prueba de ello fue el emotivo pregón que ofrecieron en 2018 durante las fiestas de la Virgen de los Milagros. Aquel día, Xabi, Mikel y Periko rememoraron vivencias cargadas de nostalgia.
Las anécdotas de juventud y las andanzas por los campos y plazas del municipio se sucedieron durante un discurso que arrancó sonrisas y alguna que otra lágrima entre los asistentes.
Un enclave con historia y pasión por la naturaleza

Ubicada entre la depresión del Ebro y la meseta castellana, a los pies del Moncayo, Ágreda cuenta con un valioso patrimonio cultural que le ha valido el título de Bien de Interés Cultural. Su condición de cruce de caminos históricos la convierte en un auténtico museo al aire libre, ideal para los amantes de la historia, la naturaleza y, como fue el caso de Periko Alonso, la caza al paso de la paloma torcaz.
Más allá de los éxitos deportivos, esta conexión íntima con el entorno natural y rural, forjada en un pequeño pueblo soriano, dice mucho de la personalidad de Xabi Alonso. Discreto, reservado y apegado a sus raíces, el nuevo entrenador del Real Madrid es también, en parte, producto de aquellos veranos a la sombra del Moncayo.